El uso de materiales compuestos para juegos de exterior y mobiliario urbano ofrece importantes ventajas en términos de durabilidad, seguridad, mantenimiento, estética y sostenibilidad, permitiendo una mayor flexibilidad en el diseño y reorganización de los espacios públicos. Estas características los hacen especialmente adecuados para mejorar la calidad y funcionalidad de los espacios públicos, aportando soluciones duraderas, resistentes a largo plazo y a la intemperie.