Los materiales compuestos se utilizan en una amplia gama de sectores, como la construcción, la arquitectura, el transporte y el montaje de furgonetas, así como en múltiples industrias, la rotulación y la comunicación visual. El amplio uso de materiales compuestos en estos sectores pone de relieve su importancia en la innovación y el desarrollo de productos y soluciones que requieren materiales ligeros, resistentes y versátiles.